Por Javier Lugo
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La reciente visita que realizo el gobernador del estado Trujillo, Gerardo Márquez a la población de Carache, ha dejado varios anuncios para el municipio, uno de ellos es la toma del servicio de agua potable, por parte de la empresa Hidroandes para su transferencia a manos del poder popular. Cabe destacar que los servicios de acueductos se encuentra actualmente en manos de la Alcaldía de Carache, desde la administración del exalcalde Sogel Sallam, al cual le fue entregado justamente por la empresa Hidroandes, manifestando la dificultad que representaba atender este municipio para la empresa, debido a los tiempos que a esta le tomaba poder atender las fallas del servicio en esta localidad.
 
Hoy y después de la asamblea del poder popular en la que participó Gerardo Márquez, el servicio de agua podría regresar nuevamente a la administración de Hidroandes, para ser entregado al poder popular para su administración.
 
Esta aseveración correspondió al propio Márquez, el cual debido a la intervención del Ing. Jesús Arnaldo Meléndez, en representación de uno de los circuitos comunales sobre la problemática que enfrentan algunas comunidades con el servicio de agua potable como La Playa, en donde menciono que el servicio se encontraba en manos de la alcaldía, generaron la pregunta del mandatario regional, “el acueducto porque no lo maneja Hidroandes”, pregunta que también le realizo al director regional de la hidrologica que se encontraba presente, procediendo anunciar que sería entregado por esta empresa al poder popular.
 
“Vamos a poner orden del pueblo (…) él es el director estadal de Hidroandes, y me está diciendo que va a venir aquí para transferir el acueducto a ustedes, al pueblo, al poder comunal”, sentenció.
  
Lo que no queda muy claro es si solo una parte del acueducto desde el sector La Pandita, hacia abajo en donde se encuentra la problemática planteada, sería el que pasaría a manos del poder comunal, o si será todo el acueducto, incluyendo a la población de Carache, el que sería asumido por Hidroandes y el poder comunal, tocara esperar para poder conocer la magnitud de la medida y quien asumiría la administración de un sistema de acueducto muy vetusto y por ende lleno de dificultades, que amerita no solo de voluntad, sino de inversión y personal calificado para su manejo.

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