Por Javier Lugo
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Este jueves 24 de octubre, la hermosa población de Cuicas se vistió de gala para celebrar el día de su patrono San Rafael Arcángel y los 180 años de su fundación, celebración que se realizó exclusivamente de forma religiosa y que contó con la presencia de destacados visitantes y de los propios habitantes, que desde la noche anterior celebraron con la tradicional serenata a San Rafael Arcángel, frente al templo parroquial.
Los actos litúrgicos estuvieron presididos por el Excmo. Mons. Ramón José Aponte Fernández, carachero y obispo emérito de la Diócesis de Valle de La Pascua, y concelebrada por Mons. Guillermo Martínez, párroco de La Concepción de Carache, el padre Romer Ortiz, párroco de Monay, quien estuvo a cargo de la homilía, el padre Endry Urbina, director espiritual del Seminario de Trujillo, el padre Eduard Morales, Vicario de Nuestra Señora de Coromoto de Boconó, el padre Juan Castellanos, párroco de San Antonio de Mendoza Fria y el padre Alexis Vásquez, parroco de Cuicas, en una iglesia totalmente llena y emocionada por su patrono y por la visita de Mons. Aponte para la celebración de la eucaristía, que estuvo cargada de mucha fe y emotividad.
Los actos religiosos también contaron con la presencia del alcalde Yohanthi Domínguez, quien envió sus palabras de felicitación a todo el pueblo de Cuicas en este día tan especial para la fe y para la historia de la segunda parroquia más grande del municipio Carache.
Igualmente, el concejal Lewis Trompetero, presidente del Concejo Municipal de Carache y habitante de Cuicas, también participó en todos los actos y compartió con todos sus coterráneos en esta celebración.
En horas de la tarde se realizó la procesión con la imagen de San Rafael Arcángel, por las principales calles de la población y la participación de los feligreses que acompañaron a la imagen en su recorrido.
Para cerrar con broche de oro, en horas de la noche el padre Pedro Terán y el grupo Pax Dei, ofrecieron un hermoso concierto de música religiosa a las afueras del templo y se culminó con la quema de un arbolito.
