Por: José Gregorio Torres.
Afianzados en sus principios esenciales, la Fundación Grupo Vitaru se ha reactivado para impulsar un nuevo proyecto de identidad local regional y nacional, en el marco de una clara visión y misión en la que es necesario fomentar los valores de la cultura y para ello fundamental crear los espacios y ambientes adecuados oportunos, desprendidos de cualquier influencia foránea que impida mantener su esencia, no por ello dejar de reconocer que otras culturas vecinas han ejercido sus influencias, pero que estás se han convertido en aliadas enriquecedoras de nuestra máxima expresión musical como lo es el género Parranda, la que durante más de tres siglos ha venido conviviendo a lo largo y ancho de nuestra frontera con el hermano estado Lara.
Si el estado Lara es reconocido como la Capital musical de Venezuela, no en vano es así, pues desde sus pueblos circunvecinos con Carache, puntualmente los que conforman los municipios Moran y Torres desde donde se ha venido gestando y enriqueciendo una simbiosis producida por el intercambio cultural comercial y de otras características, propias de pueblos fronterizos, es allí donde sé válida sin duda esa combinación e intercambio de culturas, donde, a los instrumentos básicos sexto cuatro y maracas, se suma el tambor como elemento fundamental enriquecedor de un género nacido en las canturías de velorio, el que se extendió por toda la sierra colindante de Lara y Trujillo, para ello solo hay que conocer los estudios etnológicos donde se aclara suficientemente la relación prehispánica de nuestros aborígenes Cuicas Cuibas y Coyones de los cuales es imposible ignorar su influencia, en el desarrollo y evolución, actividad cultural esencial y de intercambio como lo es la música.
Por tanto, la Fundación Cultural Grupo Musical Vitaru, hoy por hoy es una de las agrupaciones folklóricas de mayor arraigo en la identidad musical y cultural del municipio, pues con más de cuatro décadas de trabajo, llevando a las escuelas y a las comunidades su rica y variada recopilación de tiempos y estilos de parranda, se ha constituido verdaderamente en la representación genuina de la parranda Carachera, pues cada uno de sus integrantes tiene como aval el ser herederos de las diferentes expresiones del velorio, influencia directa en el género Parranda, la cual es instrumento de fé y de identidad de pueblo, amante de sus costumbres y tradiciones, es por ello que la fundación Grupo Vitaru afianza su nuevo proyecto en la escuela, en la comunidad, en la promoción y difusión de la parranda Carachera.

