Por José Gregorio Torres
Desde siempre en todos los tiempos en todas las épocas y ante las injusticias, nuestros sacerdotes han asumido un papel protagónico en defensa de los más desvalidos y aunque en algunos casos la misma iglesia universal, ha sido extremadamente diplomática para atender asuntos políticos y de orden de derechos humanos, en Venezuela no ha sido diferente, y que desde los gobiernos federales luego de la independencia, el enfrentamiento entre la iglesia y los gobiernos, siempre tuvieron incontables diferencias, pero también expresiones y personajes que destacaron por su decidida actuación en pro de estos derechos sociales tan imprescindibles para el desarrollo integral de una sociedad.
En el caso de Carache se puede recordar «el Grito de la Amable Libertad», acaecido dos años antes del nacimiento del libertador, protagonizado por Joseph Nicolás Pérez cura de Carache quien lidera el movimiento rebelde de los comuneros de Mérida y el cual tenía su origen en las Altas Montañas del Perú. Movimiento que desde Carache le permitiría tomar las armas a otro sacerdote para acompañar al liberador en la Campaña Admirable, el carachero, Fernando Perdomo. Quien ofrenda con su vida la libertad, en la Segunda Batalla de la Puerta, Barinas, nombre que aparece grabado en el Arco de Triunfo, erigido en el lugar, para recordar esa importante Batalla.
Evocando aquellos tiempos de gloria en los que nuestros Sacerdotes asumieron posturas valerosas y trascendentales para el progreso y libertad de nuestro país, nos alienta en esta oportunidad, escuchar en su arenga y desde su pulpito, las expresiones solidarias y el llamado a la reflexión de nuestros políticos locales y a todos los que participamos en esta Homilía de acción de gracias con motivo de la rendición de Cuentas por parte del Alcalde Yohanti Domínguez, dónde expresa «Hay que incentivar al voto, se debe votar, no solo para fortalecer la democracia, sino para lograr que este gobierno cambie, de no hacerlo serán treinta años más de sufrimiento para el pueblo», palabras más palabras menos este mensaje fue acogido de inmediato por los presentes quienes salieron de esta homilía fortalecidos en la fe de cristo, pero con la convicción de que todo Cristiano tiene el compromiso de actuar de acuerdo a lo que debe ser la misma libertad predicada por el propio Jesús hace dos mil años.
